EL THRASH EN 2011 (de la bazofia a lo magistral en pocas palabras)

Parto de la base que el álbum "Lulu" de Metallica y Lou Reed, no es un álbum convencional ni enteramente de los de San Francisco, pero si nos muestra una vez más que la experimentación para la banda liderada por Hetfield no es precisamente su punto fuerte. El disco es denso, anodino, repetitivo, pesado y carente de la más absoluta chispa creativa. Las letras que son lo único interesante ni siquiera son una creación propia de este binomio artístico y Lou Reed se dedica a recitar, por tanto no hay música de su parte. Es un disco largo, muy largo que no tiene apenas interés para quienes disfrutamos con “Master of Puppets” o “And Justice for All”. No hay un solo rasgo de Thrash metal en ninguna de las canciones y los solos característicos de Hammet no existen. Solo se aguanta y levemente el primer corte titulado “Brandenburg gate”. Es sin lugar a dudas uno de los mojones más grandes que ha podido dar una banda de metal, que supera incluso el más difícil todavía, hacerlo peor que en St. Anger. Esperemos que su inminente obra propia esté más cercana a Dead Magnetic.

METALLICA+LOU REED “LULU” 0/10


La banda liderada por el pelirrojo Mustaine tampoco ha conseguido acertar mucho más con un disco bastante flojo titulado “Thirteen”, por aquello de ser el número 13 en estudio de su carrera. Un disco que significaba el fin del contrato con Roadrunner y que se nota que han hecho sin interés alguno ya que incluso nos cuelan hasta 4 temas que la banda ya había grabado anteriormente. Ya digo que me parece un álbum de relleno y bastante flojo, como también me lo parecieron en su momento “The World Needs a Hero” y “United Abominations”. Solo el magnífico “Endgame” está a la altura del nombre de una banda mítica de la escena.

La verdad es que el disco no empieza mal porque “Sudden Death” y “Public Enemy Number One” son dos buenos temas, aunque el primero de ellos ya había visto la luz al ser editado el año pasado para el famoso juego Guitar Hero, pero a partir de ahí todo va en picado. La punkarra “Whose Life” es mediocre, “We the People” es simplona y repetitiva, sin carisma. “Guns, Drugs and Money” es posiblemente el peor corte del disco con un estribillo y unos riffs de los anodinos que he oído en tiempo. “Never Dead” mejora un poquito lo escuchado hasta el momento, `pero poco más se puede decir. “No World Order” es un gran tema, pero que no mejora la versión ya escuchada versión ampliada de “Youthanasia”, por eso no debemos tenerla en cuenta para valorar un nuevo trabajo. “Fast Lane” es puro relleno y poco o nada se puede decir de lo insulso que es. “Black Swan” es otro tema más que nos cuela Mustaine y Cia porque ya lo editaron en la edición especial de “United Abominations” y si ya era un tema sobrante entonces, ahora no ha cambiado en nada. “Wrecker” sin inspiración, “Millenium of the Blind” otro tema ya grabado anteriormente, “Deadly Nightshade” suena como una banda de rock simplona. Finalmente “Thirteen” no está mal, pero suena muy flojita para una banda Thrash.

La producción es también floja, donde los temas no suenan uniformes. Las batería suena muy poco natural y las guitarras apenas tienen presencia. Broderick me parece que no es guitarrista para Megadeth y no hay un solo que realmente merezca la pena y te taladre como si lo hacían en la época de Friedman. Se nota una desgana brutal en este disco y la verdad es que es el camino inverso al que hay que tomar para desplegar toda la rabia que se necesita para este estilo. Es curioso constatar que los mejores temas de Megadeth, los compuso Mustaine bajo los efectos de las drogas y el alcohol, algo que actualmente no sucede para beneficio de su salud, pero para desgracia de sus seguidores.

MEGADETH “THIRTEEN” 4/10


Mucho se esperaba de la vuelta de Belladonna a Anthrax, después de la espantada del anterior vocalista tras tener grabado casi todo el álbum y la verdad es que ha merecido la pena porque los de Nueva York se han sacado un discazo de la chistera que suena totalmente ochentero y puro Anthrax al 100%.

Tras una intro atípica suena “Earth on Hell” pegándonos un puñetazo violento en la cara. Un tema con una tralla brutal y esas melodías que Belladonna siempre ha sabido hacer. “The Devil you know” podría estar perfectamente en “Among the Living” o “State of Euphoria”. “Fight ‘Em Til You Can’t” es un single perfecto con unas guitarras poderosas, la base rítmica atronadora y la voz melódica de Joey que junto a un estribillo matador que se queda en el cerebro y ya no puedes sacarlo. “I’m Alive” comienza con un coro in crescendo junto a las guitarras matadoras de Rob Caggiano y Scott Ian. El estribillo es también muy pegadizo y los solos geniales. “In The End” está dedicada a Dimebag Darrel y Ronnie James Dio y es un tema atípico en Anthrax. Es un tema largo con una melodía muy cercana por momentos a la que utilizaba DIO en Heaven & Hell, como si fuera un sentido homenaje. “The Giant” es puro Anthrax caña y ramalazos raperos como ya nos acostumbraron en los 80. “Judas Priest” es posiblemente el corte más flojo de todo el álbum, pero aún así pasa con nota y no desentona con el resto del disco. “Crawl” es un tema sencillo, casi a medio tiempo que nos traslada hacia “The Constant” vuelve a traernos una nueva dosis de caña marca de la casa. Con “Revolution Screams” finaliza el disco, pero una pequeña sorpresa nos espera ya que un tema oculto se nos descubre a nuestros oídos, la versión del tema “New Noise” de Refused.

En definitiva un gran disco, bien producido, con una bonita portada que evidentemente se disfruta mucho más en su formato en vinilo y una muestra de por donde está el camino para hacer buenos discos de Thrash Metal en el siglo XXI.

ANTHRAX “WORKSHIP MUSIC” 8,5/10


Tengo que decir que Machine Head fue en su momento una banda que devoré hasta la saciedad con sus dos primeros discos “Burn my Eyes” y “The More Things Change”, para perderles la pista tras su incursión en el Groove Metal más cercano al Nu. Pero hete aquí que hace un par de años alguien me recomendó escuchar “The Blackening” y la verdad es que me convenció, aunque no me parece que sea mejor que su álbum debut.

Esta maravilla titulada “Unto The Locust” puede catalogarse como lo mejor que han hecho las huestes de Rob Flynn junto a “Burn my Eyes” y supera en mi opinión al magnífico “The Blackening” . Tras 4 años y medio los Machine Head han vuelto de manera abrasadora, enérgica y brutal.

“I Am Hell (Sonata In C#)” abre el disco como una apisonadora, sorprendiéndonos con una sonata en clave de metal. Primero mediante un vasto medio tempo y después con la tralla absoluta, la más que probable apertura del concierto con esta canción desatará la locura colectiva entre los fans. Caos total. El tema llega a su momento álgido con el empleo de las altísimas tonalidades vocales en el estribillo, y con un emotivo riff, ejecutado primero con guitarras acústicas y después nuevamente con la distorsión, finalizando la canción.

Casi sin poder asumir lo que estamos percibiendo ataca “Be Still And Know”, que aun siendo una canción más lenta, fluye fácilmente hacia un melódico estribillo en el cual junto a las voces suena el mismo tapping de guitarras que abre la canción. En la parte central del tema nos topamos con un intercambio de solos de ambos guitarristas que desemboca en una gran melodía a dos voces. Se repite una vez más toda la estructura de riffs, voces, concluyendo con el tapping principal.

“Locust” empieza con unas guitarras limpias que acaban por dar paso a un sonido más crudo, cercano a los Sepultura del Arise. Riff machacón con doble melodía de guitarra que junto a la rabia vocal de Rob hacen un tema genial que después contiene unos momentos de relax con voces limpias. “This Is The End” comienza con un suave arpegio de guitarras limpias para luego aparecer unos acertados blasbeats por parte del baterista Dave McClain lo acompañan hasta la entrada del próximo riff, con el cual también surgen los primeros enérgicos berridos de Rob Flynn. El estribillo es muy melódico, logrando un equilibrio entre lo brutal y lo melódico que a mí personalmente me encanta.

“Darkness Within” nos transporta a otro sonido poco reconocible, ya que solo oímos una guitarra acústica y la voz limpia de Rob, recordándome con esas harmonías vocales a los Paradise Lost más Doom de mediados de los 90. “Pearls Before Swine” diría que es una clara evolución de los temas de su anterior disco, un peldaño más alto si cabe porque lo reúne todo condensados en este tema, melodía, rabia, crudeza, riffs machacones, thrash de vértigo, solos fabulosos, acojonante.

Cierra el disco “Who We Are”, en el cual como curioso detalle, participan en el coro, voces infantiles, coreadas por los hijos de Rob Flynn y del productor Juan Urteaga poniendo el broche de oro a un trabajo completísimo.

MACHINE HEAD “UNTO THE LOCUST” 9/10


Tengo que decir que a Presidio les conozco desde el embrión que fue Diceroll, en el cual cantaban en inglés pero ya tenían la idea clara de tocar Thrash Metal. A su batería Jose L. Hermosa le conozco de mucho antes cuando tocaba en Halley, Crossbones o Hydra, es toda una leyenda entre los músicos y seguidores del metal de la ciudad bañada por el Pisuerga. Dicho esto y siendo honesto como a mí me gusta ser, nunca vi en Presidio una banda con la capacidad de salir más allá de nuestra región. No había calidad en las composiciones para dar el salto, aunque se movían dentro del género con bastante soltura y no por ello lo hacían mal, pero mi sorpresa fue mayúscula cuando telonearon a Alice Cooper en el pabellón Huerta del Rey de la capital pucelana y descubro una banda Groove que en nada tiene que ver con el discurso mantenido estos años, siendo este mucho más agresivo y en mi humilde opinión totalmente equivocado, algo que incluso le llegué a comentar al propio Jose.

Diez meses después nos sorprenden con un disco que lidera un nuevo vocalista y ya no queda nada de rastro de aquel sonido Groove y si aparecen unas maravillosas harmonías vocales que contienen unas melodías que sumadas al potente sonido de la sección rítmica, han dado como resultado un excelente álbum.

El disco empieza con el que es para mí su mejor tema “Deseo del Fin” que la banda presentó con un video-clip de adelanto muy bien facturado. El inicio con ese riff demoledor y la sección rítmica machacona, liderada por Jose hasta llegar a las primeras estrofas que Álvaro convierte en suave melodía que marca un contrapunto con el sonido devastador que hace que el tema suene potente, pero muy melódico. El estribillo es muy pegadizo, tanto que yo me pasé varios días canturreando el tema.

“Sudor” es un tema que en principio no me convenció demasiado, pero que con las escuchas gana. Es un tema machacón y quizás más repetitivo, pero que como alguien me comentó, puede funcionar muy bien en directo. “Metralla” tiene un inicio potente muy en la línea de los Pantera de “Cowboys from hell” donde la batería de Jose está muy presente y la melodía vocal de Álvaro junto a las líneas de guitarra generan un ambiente al tema algo atípico para el Thrash, pero a la vez sin salirnos del genero. “Desafio” me recuerda mucho a los mejores Hamlet con esa presencia de guitarras y la voz muy por encima del resto.

“Vieja Lección” es un tema complejo musicalmente, con una cantidad de variaciones que exigen varias escuchas, pero que cada matiz tiene una calidad que nos permite deleitarnos con sonidos cercanos a Söber en su primera parte, el jazz ó el progresivo tras el estribillo que me hacen pensar en Dream Theater por un lado, pero también en un par de bandas que hacen Thrash progresivo como Mastodon o Nevermore, aunque más por la propuesta en si que por el sonido.

“Solo Yo” comienza como una balada, que se rompe tras la primera estrofa y que me vuelve a recordar a Hamlet, con esos riff de guitarra en la parte del estribillo. “Dentro” comienza como si se tratara de los mismísimos Megadeth, que eran en mi opinión la mayor influencia de la banda, aunque después aparece de nuevo la personalidad que marca en mi opinión la voz de Álvaro con ese tono vocal melódico. “Despertar” sigue en la misma línea de temas anteriores.

“Nadie más” comienza de forma acústica para dar paso a las guitarras de Jorge Gutiérrez y regresar a un sonido que combina la dureza con la suavidad tanto a nivel instrumental como vocal, ya que Álvaro es capaz de cantar con voz desgarrada en los momentos potentes y con tono suave cuando el tema necesita de ello. Es un tema muy atípico que puede recordar a Killswitch Engage.

En definitiva un gran disco que sabe ponderar entre el sonido de los clásicos como Metallica o Megadeth con toques más actuales, atreviéndose incluso a experimentar con lo progresivo. Lo más interesante bajo mi punto de vista es la Voz de Álvaro que ha dotado de un gran juego de harmonias vocales que además no son muy típicas del genero y que por ello le dan una gran originalidad.

PRESIDIO “LA EDAD DE LOS ESCLAVOS” 8/10

Por: Javier Gutiérrez